Querido mundo,
Párate, detente justo ahí y no te muevas. Por un momento te pedimos que congeles el tiempo para que Koh Kood nos devore por completo. Muchos han sido los intentos frustrados de encontrar una isla paradisíaca en tierras Tailandesas pero al fin estamos catando un pedacito de paraíso que nos sabe a gloria.
Sin bancos ni 7Eleven. No necesitamos más que arena blanca, palmeras con cocos y agua cristalina y peces bailando alrededor de nuestros pies sin pedir nada a cambio.
Siempre tuyos,
Viajeros reverdes
