Hace ya algún tiempo que me rondaba por la cabeza realizar un proyecto fotográfico. La idea era captar diferentes elementos del entorno al mismo tiempo pero en lugares diferentes.
Mientras nos encontrábamos en Italia, supe que Mariana iba a viajar a Galápagos en junio. No podía dejar escapar la oportunidad de acercarme de alguna manera a estas recónditas islas con una naturaleza tan singular. Y qué mejor que esta talentosa chica para poner en práctica este primer vis a vis fotográfico: Galápagos y Toscana retratados al mismo momento.
Este es el resultado de fotografiar a lo largo de una semana el cielo, el horizonte, las fachadas, los animales, las plantas, las texturas y los pies de un par de personas localizadas en rincones distantes y lejanos.
No te pierdas estas dos miradas al mundo que comparten estrechamente su pasión por viajar, la naturaleza y los animales.
Cielo
Galápagos
Cielos con nubes vi muchos, pero pienso que el que mejor define a las islas es éste, con una fragata real en pleno vuelo. Se alcanza a ver una manchita roja en su cuello, que es la bolsa gular que usan en período de apareamiento.
Toscana
Los días amanecían rasos y azules a finales de primavera pero al caer la tarde, las nubes siempre se dejaban ver. Era parte del encanto de un territorio donde a veces, al cielo le daba por pintarse a sí mismo con un pincel blanco.
Horizonte
Galápagos
La silueta del islote Daphne menor, otro islote al fondo, las nubes y el Pacífico tan azul. Ahí abajo, aunque no se vean, hay tortugas, tiburones, peces multicolores y jardines de anguilas.
Toscana
Lo curioso de esta región de Italia es que sus tierras parecen un mar de olas dorado en movimiento. Sus crestas están salpicadas de pueblos y masías y, de vez en cuando, cipreses en fila surcan su perfil regalando una imagen mágica.
Fachadas
Galápagos
Una agencia de turismo en Puerto Villamil, con letras dibujadas y siluetas de animales marinos. Mucho más llamativa que cualquiera de las que usaba avisos modernos… y además con esa preciosa Opuntia dando la bienvenida a los viajeros.
Toscana
Las puertas y las ventanas dicen mucho de los lugares y la manera que se unen la vida exterior con la interior. Aquí, los números, los buzones, las plantas y las flores decoran las fachadas de arquitecturas que esconden mucha historia.
Animales
Galápagos
Galápagos está lleno de animales, cada esquina, cada playa tiene los suyos. Unos de mis favoritos fueron los leones marinos que se podían ver durmiendo en todas partes… aquí, acompañados de una iguana de mar.
Toscana
El clima mediterráneo de la Toscana es ideal para que pequeños lagartos como éste asomen la cabeza en caminos y zonas de vegetación aclarada. Lo que más me llamó la atención fue su pigmento amarillo, que le hace único de sus vecinos europeos.
Plantas
Galápagos
Opuntia Megasperma, una especie de cactus gigante, endémica de las islas Galápagos. Es alimento para las tortugas gigantes y las iguanas de mar, y, como se puede ver en esta foto, es absolutamente precioso :-)
Toscana
Esta planta es del tipo cactus/suculenta, muy presente en las macetas de toda puerta italiana. Sus tallos se aglutinan simétricamente y de tal manera que recuerdan a la bella forma de un mándala.
Texturas
Galápagos
¡Tantas texturas de donde elegir! Pero una de mis favoritas fue ésta, la de las iguanas de mar. Esta iguana estaba descansando en una roca volcánica en la Playa del Amor, en isla Isabela. ¡Qué ganas de acariciarla!
Toscana
Una vez que los vi, no pude dejar de pensar en ellos. Los campos de trigo son bellos e hipnóticos y su textura baila al son del viento sin esfuerzo alguno. Terriblemente fotogénicos.
Pies
Galápagos
Mis pies frente a una planta de mar que arrastraron las olas en Tortuga Bay. Arena suave, aire fresco, mar cristalino y muchas iguanas que aprovechaban el sol y pasaban surcando las olas.
Toscana
Mis pies dentro de la catedral de Siena sobre un mosaico lunar que pedía a gritos una foto. ¿Cuántas personas, a lo largo de la historia, habrán pisado y repisado estas baldosas?